En un bowl colocar la harina tamizada, la maicena, la sal, la pimienta negra, el jengibre molido, el tomillo, el pimentón y la pimienta de cayena.
En otro bowl batir los huevos.
Pasar el pollo en la mezcla de harina, sacudiendo cualquier exceso. Sumergir en el huevo batido y pasar nuevamente por la mezcla de harina. Repetir hasta que todas las pechugas de pollo estén cubiertas.
En una sartén, calentar aceite a fuego medio y cocinar las pechugas de pollo durante 4 minutos por lado, hasta que estén crujientes y doradas. Colocarlas en un plato forrado con servilletas de papel.
En una cacerola calentar 2 cucharadas de aceite de oliva y cocinar el ajo durante unos 30 segundos. Agregar la miel, el vinagre de manzana y la salsa de soja.
Cocinar a fuego lento durante 8 a 10 minutos, hasta que espese. Dejar enfriar un poco.
Sumergir las pechugas de pollo cocidas en la salsa y haciendo que se cubran por completo. Servir decorado con cebollino y cebolleta y ensalada de verduras mixtas.