Agrega poco a poco los 90g de harina, amasa la masa hasta que quede muy suave, tapa con un paño limpio y deja reposar la masa 30 minutos en un lugar cálido.
Espolvoree una superficie con harina y abra la masa hasta que tenga un grosor de 0,5 cm.
Unte con salsa de tomate, cubra con queso mozzarella y rodajas de pepperoni, espolvoree con orégano y enrolle como un rollo.
Corta rodajas de aproximadamente 3 cm y colócalas en una bandeja de horno antiadherente.
Hornee en un horno precalentado a 180 grados durante aproximadamente 30 minutos o hasta que estén bien dorados.