Forrar con papel encerado la base de un molde para pasteles desmontable.
Triturar las galletas Marías y colocar en un bowl.
Derretir la mantequilla, mezclarla con las galletas trituradas y hacer una base en el fondo del molde previamente listo, comprimir la mezcla con ayuda de una cuchara o un vaso que tenga la base plana. Refrigerar por 20 minutos.
Licuar la leche condensada, el aguacate, el queso crema y el jugo de limón.
Verter suavemente la mezcla en el molde con la base ya refrigerada. Emparejar la mezcla y refrigerar mínimo 4 horas.