Para la base: procesar las galletas de vainilla junto a la mantequilla derretida. Colocar la mezcla dentro de un molde de torta desmontable y presionar en el fondo.
Colocar las rebanadas de torta Battenberg alrededor del borde del molde, para formar una pared por los costados.
Para la cheesecake: colocar la crema de leche, el azúcar impalpable, el queso crema, la gelatina y la esencia de vainilla en una batidora de pie y combinar bien.
Colocar la mezcla dividida en dos partes iguales en dos bowls. Colocar el colorante rosa en un bowl y en el otro el colorante amarillo. Mezclar bien.
Colocar las capas rosa y amarilla intercaladas, congelando 8 minutos entre cada capa para que no se mezclen los colores.
Una vez que las capas lleguen hasta el borde del molde de torta, enfriar 4 horas.
Con un palo de amasar, estirar el mazapán y recortar con el diámetro del molde. Una vez que hayan pasado las 4 horas colocarlo sobre la torta.