Para la base, procesar las galletas de vainilla junto al cacao en polvo y la mantequilla derretida. Colocar la mezcla en la base de un molde para tortas desmontable, presionando contra el fondo y los costados. Reservar en la heladera por 30 minutos.
Derretir a baño maría el chocolate con leche y el chocolate amargo.
En un bowl, colocar la gelatina sin sabor en agua hirviendo.
En otro bowl batir el queso crema, el azúcar glas y la crema de leche y añadirle la mezcla de gelatina sin sabor.
Dividir esta mezcla en dos partes, a una agregarle el chocolate con leche derretido y a la otra el chocolate amargo derretido.
Verter la mezcla de chocolate con leche sobre la base de galletas trituradas y congelar por 15 minutos.
Una vez firme, colocar por encima la mezcla de chocolate amargo y refrigerar por 3 horas.
Para la ganache final, calentar la leche y el azúcar de caña en una cacerola y añadirlo al chocolate amargo triturado. Mezclar bien hasta que estén combinados y volcarlo sobre la torta refrigerada.
Volver a colocar la torta en la heladera durante al menos una hora más o hasta que la ganache esté endurecida.