Procesar la harina, la sal, la remolacha y los huevos hasta que se forme una masa. Colocarla sobre una mesada enharinada y amasar para formar una bola.
Aplastar la bola en un disco, envolver en film y dejar reposar a temperatura ambiente durante 1 hora.
Dividir la masa en 4 piezas. Cortar cada pieza en cubitos y rodar cada uno sobre un rallador de queso para formar los ñoquis. Cocinarlos en agua hirviendo hasta que floten. Servir con salsa a elección