En una olla a fuego medio-alto, agregar el aceite, la mantequilla y la cebolla.
Revolver y poner a fuego lento, cubrir con una tapa. Cocinar por 30 min. o hasta que las cebollas estén blandas y dulces.
Luego, regresar a fuego medio-alto y cocinar hasta que las cebollas estén doradas. Revolver de vez en cuando para que no se peguen.
Agregar el ajo y cocinar, seguido del vino blanco y cocinar hasta que el líquido se haya reducido un poco.
Agregar la harina y cocinar por 2 min.
Añadir el brandy y el tomillo, verter el caldo y llevar a ebullición. Revolver y reducir el fuego. Cocinar por 30 min.
Precalentar el horno a 220C.
Cortar la parte superior del bowl de pan y ahuecar el centro, dejando una pared alrededor. Rociar todo el recipiente con aceite de oliva y sazonar con sal y pimienta.
Colocar las rodajas de gruyere alrededor del bowl, levantar la "tapa", rociar con aceite de oliva y colocar el gruyere encima.
Colocar en el horno por 3-5 min. o hasta que el queso se derrita.
Servir la sopa en los bowls de pan y colocar 2 rebanadas de gruyere más encima de la sopa.
Asar hasta que el queso se derrita y se dore.
Servir inmediatamente con un buen molido de pimienta negra y tomillo extra.