En una cacerola pequeña, combinar todos los ingredientes de la salsa de mantequilla de maní y cocinar a fuego medio hasta que se disuelva el azúcar. Dejar enfriar.
Para las Tortas:
Precalentar el horno a 180º.
Con una cucharada de mantequilla, engrasar 4 moldes para muffin.
Colocar un recipiente sobre una olla de agua hirviendo y derretir el chocolate y la mantequilla, revolviendo de manera constante.
En otro recipiente batir los huevos, las yemas y el azúcar hasta que se combinen. Luego añadir la harina y el cacao en polvo. Añadir la mezcla de chocolate y mezclar hasta que estén bien combinados.
Colocar un octavo de la mezcla del chocolate en cada molde, después hacer un pequeño agujero en la mezcla y agregar 2 cdas. de mantequilla de maní en el centro de cada uno. Cubrir con la mezcla de chocolate restante, y colocar los 4 moldes en una fuente para horno.
Hornear durante unos 13 minutos.
Desmoldar los pasteles lo más rápidamente posible, cubrir con la salsa de la mantequilla de maní y polvo de cacao en polvo. Servir inmediatamente. Es importante servir pasteles de lava antes de que se enfríen, para que el centro permanezca líquido.