300 gr. de chocolate negro (aproximadamente 70% de cacao)
100 gr. de chocolate con leche
2 cucharadas de mantequilla sin sal
1 ¼ tazas de crema
1 cucharadita de sal
Para la Crema:
Ingredientes
1 taza de agua
3 cucharadas de gelatina
1 taza de miel
1 cucharadita de extracto de vainilla
Pasos
Para la Base de Mantequilla de maní:
Precalentar el horno a 350º
Mezclar en un bowl con un mezclador de mano o mezclador de pie equipado con el accesorio de paleta, la mantequilla, el azúcar granulada y el azúcar moreno, y la crema; a velocidad media hasta que liso. Añadir el huevo, la vainilla y la mantequilla de maní y mezclar hasta que estén combinados. Añadir la harina y la sal y mezclar en punto bajo hasta que se acaba de combinar.
Presionar la masa en el fondo de una placa para horno engrasada. Hornear de 20 a 25 minutos hasta que la masa esté dorada. Deje enfriar ligeramente.
Para el Relleno de Chocolate:
En un tazón grande colocado sobre una olla de agua hirviendo, derretir el chocolate con mantequilla, revolviendo de vez en cuando. Agregar la crema y la sal hasta que estén bien combinadas, luego verter la mezcla en la corteza. Dejar enfriar.
Para la Crema:
Verter ½ taza de agua en el tazón de un mezclador de pie y espolvorear la gelatina por encima. Dejar de lado.
Agregar la miel y el resto de ½ taza de agua a una cacerola mediana a fuego medio. Llevar a ebullición, a continuación, reducir el calor y cocinar a fuego lento hasta que llega a una consistencia de caramelo.
Con el mezclador en funcionamiento, verter cuidadosamente el jarabe de miel de una manera lenta y continua. Agregar el extracto de vainilla, girar la batidora a alta velocidad y batir durante 10 minutos, hasta que se formen picos blancos y brillantes y el tazón de mezcla se enfríe al tacto.
Agregar la crema en la tarta con cucharadas grandes.
Utilizar una antorcha de cocina para caramelizar las partes superiores y laterales.